Patricia ramírez y Nacho Coque estarán en Zaragoza los días 13, 14 y 15 de julio para
explicarles con todo detalle a los alumnos del Curso de Entrenamiento los aspectos fundamentales en trabajo físico adecuado al baloncesto.
Formamos cuerpos adaptados al baloncesto y lo hacemos desde las edades más tempranas, cuando los niños se inician en las escuelas de baloncesto impulsados por la ilusión de jugar, de crecer con nuestro deporte y junto a sus amigos.
Y en ese entorno que debe ser amable, que debe fomentar pasión en el encuentro con una nueva actividad, somos capaces de impulsar desde el conocimiento y la sensatez los aspectos físicos claves relacionados con el equilibrio, con los apoyos, con el control del cuerpo.
Hay que tomar consciencia de la importancia de la preparación física en la iniciación, en las escuelas de baloncesto, cuando los niños o niñas llegan para practicar baloncesto.
Hay algo clave que hay que tener en consideración y es que cuando falla la protección muscular, falla el resto.
Hay que cambiar la perspectiva sobre cuando empezar a trabajar la fuerza – adecuada siempre a las edades – y en lo posible y de la forma individualizada que se pueda, inculcar valores y cultura deportiva en las familias.
El acondicionamiento físico y muscular desde las edades más tempranas aumentará el rendimiento y prolongará la carrera deportiva de los jugadores.
Nacho Coque
Los entrenadores, ya sean de equipos de formación o seniors, de élite o del baloncesto mayoritario jugado en competiciones autonómicas, necesitamos herramientas para poder dirigir a nuestros equipos adecuadamente.
Somos entrenadores y por ello gestores de grupo por lo que todo aquello relacionado con aspectos psicológicos se convertirá en conocimientos de inmenso valor a la hora de realizar nuestra tarea.
No es necesario ser un psicólogo para ser entrenador pero sí se ha de saber escuchar, tener empatía, saber comunicar…
Por muchos conocimientos que tenga un entrenador sobre el baloncesto será necesaria que disponga de capacidad para saberlos transmitir de manera adecuada, corrigiendo pero a la vez reforzando, valorando las acciones positivas para que ese jugador se sienta motivado, apasionado para volver al siguiente entrenamiento.
Los entrenadores son los líderes y los líderes necesitan transmitir entusiasmo, desde la palabra y desde el gesto.
Los entrenadores son gestores de personas y por lo tanto han de transmitir desde el ejemplo.
Patricia Ramírez
Formamos cuerpos adaptados al baloncesto y lo hacemos desde las edades más tempranas, cuando los niños se inician en las escuelas de baloncesto impulsados por la ilusión de jugar, de crecer con nuestro deporte y junto a sus amigos.
Y en ese entorno que debe ser amable, que debe fomentar pasión en el encuentro con una nueva actividad, somos capaces de impulsar desde el conocimiento y la sensatez los aspectos físicos claves relacionados con el equilibrio, con los apoyos, con el control del cuerpo.
Hay que tomar consciencia de la importancia de la preparación física en la iniciación, en las escuelas de baloncesto, cuando los niños o niñas llegan para practicar baloncesto.
Hay algo clave que hay que tener en consideración y es que cuando falla la protección muscular, falla el resto.
Hay que cambiar la perspectiva sobre cuando empezar a trabajar la fuerza – adecuada siempre a las edades – y en lo posible y de la forma individualizada que se pueda, inculcar valores y cultura deportiva en las familias.
El acondicionamiento físico y muscular desde las edades más tempranas aumentará el rendimiento y prolongará la carrera deportiva de los jugadores.
Nacho Coque
Los entrenadores, ya sean de equipos de formación o seniors, de élite o del baloncesto mayoritario jugado en competiciones autonómicas, necesitamos herramientas para poder dirigir a nuestros equipos adecuadamente.
Somos entrenadores y por ello gestores de grupo por lo que todo aquello relacionado con aspectos psicológicos se convertirá en conocimientos de inmenso valor a la hora de realizar nuestra tarea.
No es necesario ser un psicólogo para ser entrenador pero sí se ha de saber escuchar, tener empatía, saber comunicar…
Por muchos conocimientos que tenga un entrenador sobre el baloncesto será necesaria que disponga de capacidad para saberlos transmitir de manera adecuada, corrigiendo pero a la vez reforzando, valorando las acciones positivas para que ese jugador se sienta motivado, apasionado para volver al siguiente entrenamiento.
Los entrenadores son los líderes y los líderes necesitan transmitir entusiasmo, desde la palabra y desde el gesto.
Los entrenadores son gestores de personas y por lo tanto han de transmitir desde el ejemplo.
Patricia Ramírez