El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid CPFCM, que representa a nivel regional a 8.200 fisioterapeutas, ha anunciado durante la presentación de su memoria de actividades desarrolladas bajo criterios de RSC correspondiente a los años 2011-2013, que su próximo objetivo de RSC es la creación de la figura del Defensor del Ciudadano.
Tras crear la figura del Defensor del Colegiado, para proteger los derechos de los profesionales, actualmente la institución se encuentra en trámites para institucionalizar esta nueva figura, que será un agente de intermediación en posibles conflictos entre ciudadanos y colegiados.
Los colegios profesionales no sólo están implicados con sus colegiados, sino también con la sociedad.
En la actualidad ya ofrecen una ventanilla única para que el ciudadano presente sus reclamaciones, caso en el que están obligados a actuar aplicando su código deontológico si ha existido una mala praxis por parte del profesional.
Los colegios profesionales garantizan que se cumplan los requisitos legales para que los profesionales ejerzan su función y aseguran que no haya intrusismo, que haya buenas prácticas y buen ejercicio profesional y que sus colegiados ejerzan de la mejor forma posible, siguiendo unos criterios éticos, legales, respetando el profesionalismo y con unos estándares definidos de calidad.
Un colegio no tiene que ser un elemento corporativo de defensa solo de sus colegiados, sino que tiene que estar implicado con la sociedad a la que sirve.
Si esto es aplicable a cualquier colegio, más aún a colegios del ámbito sanitario donde los errores pueden resultar fatales.
Con la publicación de este documento, el CPFCM se convierte en el primer colegio profesional de fisioterapeutas de España, y en uno de los primeros de ámbito sanitario, en publicar una memoria de RSC, disponiendo además de validación externa de la información contenida, la trazabilidad de la misma y el tratamiento de los datos, efectuada por la Fundación Ad Qualitatem.
Tras crear la figura del Defensor del Colegiado, para proteger los derechos de los profesionales, actualmente la institución se encuentra en trámites para institucionalizar esta nueva figura, que será un agente de intermediación en posibles conflictos entre ciudadanos y colegiados.
Los colegios profesionales no sólo están implicados con sus colegiados, sino también con la sociedad.
En la actualidad ya ofrecen una ventanilla única para que el ciudadano presente sus reclamaciones, caso en el que están obligados a actuar aplicando su código deontológico si ha existido una mala praxis por parte del profesional.
Los colegios profesionales garantizan que se cumplan los requisitos legales para que los profesionales ejerzan su función y aseguran que no haya intrusismo, que haya buenas prácticas y buen ejercicio profesional y que sus colegiados ejerzan de la mejor forma posible, siguiendo unos criterios éticos, legales, respetando el profesionalismo y con unos estándares definidos de calidad.
Un colegio no tiene que ser un elemento corporativo de defensa solo de sus colegiados, sino que tiene que estar implicado con la sociedad a la que sirve.
Si esto es aplicable a cualquier colegio, más aún a colegios del ámbito sanitario donde los errores pueden resultar fatales.
Con la publicación de este documento, el CPFCM se convierte en el primer colegio profesional de fisioterapeutas de España, y en uno de los primeros de ámbito sanitario, en publicar una memoria de RSC, disponiendo además de validación externa de la información contenida, la trazabilidad de la misma y el tratamiento de los datos, efectuada por la Fundación Ad Qualitatem.