En solo 4 meses y 2 semanas, MAKRO ha levantado en pleno centro de la capital de
España un edificio de 17.800 metros cuadrados que constituye un ejemplo
arquitectónico en calidad y sostenibilidad.
El inmueble, diseñado al más puro
estilo minimalista, dispone de una enorme fachada metalizada y bioclimática.
Cuenta con placas solares en la cubierta que permiten el aprovechamiento máximo
de la energía.
La inversión ha sido de 22 millones de euros.
Se encuentra en el
número 40-42 del Paseo Imperial, muy próxima a la popular Puerta del Sol.
De los 17.800 metros cuadrados de superficie, 1.600 han sido dedicados a espacio de ventas, ya que MAKRO se dedica a la distribución especializada a Hostería y Detallistas de Alimentación.
En
el interior destaca la zona de productos perecederos, en una sala cerrada y
acondicionada, con una temperatura y humedad acorde a cada artículo (pescado,
carne, frutas y verduras o lácteos) para que el cliente encuentre los alimentos
en unas condiciones óptimas.
Del
mismo modo, la zona de bodega se ha acondicionado para mantener los vinos en
las mejores condiciones en lo que respecta a iluminación, humedad y
temperatura.
La
tienda dispone de un ascensor acristalado, para llegar a una de las plantas
superiores, en la que se ubica la zona Premium, un espacio destinado a catas,
degustaciones y formación a clientes. Dispone también de un parking espacioso
con 100 plazas exclusivas para clientes. Y está adaptado para facilitar el
acceso a personas con discapacidad.
El
edificio es en sí mismo una gran innovación para la construcción, pues se ha
rehabilitado el espacio en el que se ubica la tienda convirtiéndolo en un
edificio eficiente, y sostenible con el medio ambiente y el entorno: cuenta con
un sistema de recuperación de energía, una fachada bioclimática que disminuye
la entrada de radiación solar, e iluminación LED, que permite un considerable
ahorro energético.
Todo
un espectáculo visual de sencillez y atrevimiento en pleno centro de Madrid, para
los amantes del diseño moderno.
Para
el diseño y ejecución de esta rehabilitación, MAKRO ha contado con la empresa
constructora Ankarsa y el estudio de arquitectura Enrique Bardaji.