La puesta en marcha del proyecto del Centro Botín en Santander comienza ya a ser visible con la inauguración oficial de los Jardines de Pereda y del nuevo túnel, por parte del Presidente de la Fundación Botín, Emilio Botín; el Presidente de la Autoridad Portuaria, José Joaquín Martínez Sieso; el Alcalde de Santander, Iñigo de la Serna; y el Presidente del Gobierno de Cantabria, Ignacio Diego.
La Fundación Botín destinará 80 millones de euros (15 a la construcción del paso inferior y otros 15 a la remodelación de los Jardines), la mayor inversión privada en una infraestructura cultural en España.
El proyecto ha sido desarrollado por el paisajista Fernando Caruncho en colaboración con el estudio de Renzo Piano.
Se ha duplicado su extensión de 20.000 metros cuadrados a 48.000 y triplicado su superficie verde, pasando de 7.003 a 20.056 metros cuadrados.
Hasta el próximo 10 de octubre, los Jardines de Pereda y su anfiteatro exterior acogerán un amplio programa de 150 actividades para niños, jóvenes, adultos y familias que llenarán de vida los Jardines este verano, comenzando así a cumplir su objetivo más local: generar un nuevo lugar de encuentro en el centro de la ciudad que con arte y la cultura dinamice la vida de Santander.
Esta programación se ha realizado de forma coordinada con el Ayuntamiento de Santander y la Fundación Santander Creativa, de cuyo Patronato forma parte también la Fundación Botín, y que también realizarán actividades en los Jardines durante estos meses.
La intervención en los Jardines de Pereda, iniciada en agosto de 2013, conserva la memoria del lugar respetando sus hitos esenciales y permite al paseante disfrutar de vistas y rutas inéditas, conduciéndole directamente desde el centro histórico de Santander hasta la Bahía.
Esta prolongación del centro de la ciudad al mar ha sido posible gracias a la anulación del antiguo vial que discurría delante de los Jardines y a la supresión del tráfico que, desde hace un mes, se canaliza por medio de un nuevo túnel, de 219 metros de longitud, que permite el paso de más de trece millones de vehículos al año.
Ya podemos empezar a disfrutar de uno de los espacios públicos más especiales de nuestro país, al borde de una de las Bahías más bonitas del mundo, con el Centro Botín integrado en ellos.
El Centro Botín es el proyecto más global, más local y más social puesto en marcha por la Fundación Botín en sus 50 años de historia.
El Centro Botín es un modelo de colaboración fiel y eficaz entre las administraciones públicas, las instituciones privadas y la sociedad en su conjunto.
Emilio Botín
Los Jardines de Pereda
Los Jardines de Pereda están situados sobre los terrenos ganados al mar que fueron utilizados como muelle portuario en 1805. Se inauguraron oficialmente en 1905, coincidiendo con la celebración de la Exposición de Artes e Industrias.
En ellos se encuentran ejemplares de magnolias, acebos, palmeras, cedros, castaños de Indias, pinos, bojs, tejos, tilos y manzanos de flor.
El proyecto de remodelación de los Jardines de Pereda ha conservado y potenciado todo aquello que el jardín ha guardado y protegido a lo largo del tiempo, tanto en las especies vegetales -el número total de árboles del Jardín es de 262, de los cuales 141 son de nueva plantación- como los hitos y monumentos que guardan la memoria del jardín y que son, en palabras de Caruncho: “expresión de la historia, de los momentos de esplendor de esta tierra cántabra”.
Como manifiesta el paisajista: “un jardín público antiguo debe siempre preservar y poner en valor esos hitos de la memoria social e individual que conectan el pasado con el presente y el futuro. Esto es lo que pretende este proyecto: unir presente y pasado en las formas estéticas del siglo XXI, abriéndolo al futuro”.
El propósito de la actuación en los Jardines de Pereda es devolver al jardín un nuevo esplendor, dándole al parque un siglo más de vida y celebrando así su bicentenario.
Sobre la trama actual del antiguo Jardín de Pereda, Fernando Caruncho ha sobrepuesto una cuadrícula que prolonga la de la ciudad, creando nuevas perspectivas que la conectan con la Bahía y el edificio de Renzo Piano. Sobre esta, se superpone una elipse, reminiscencia del diseño primigenio de los Jardines, que da unidad al conjunto, además de dotarle de un ritmo interno propio “a través de masas vegetales que se abren y cierran en zonas de sombras y claros”.
El tratamiento de la luz y el color en el conjunto es esencial. Para el acabado de caminos y plazas se ha utilizado un pavimento mixto de hormigón azulado tratado con sulfato de cobre y hierro, en conexión con los azules de la Bahía, y losas de granito, algunas de ellas recuperadas de los jardines existentes. De esta forma, este pavimento azulado se transforma en un elemento “acuoso” de conexión entre la ciudad y la Bahía.
En cuanto al mobiliario urbano, se han colocado más de 60 bancos de madera y acero inoxidable a lo largo de los caminos y plazas. Así mismo, se han mantenido los 19 bancos de piedra y forja existentes, remanentes de los años cincuenta, que se conservan y reubican en los Jardines de Pereda, manteniendo la conexión histórica de éstos al jardín.
Además de la numerosa memoria histórica que ha conservado el proyecto como la Fuente de Concha Espina, el Monumento a Pereda o el Monumento a la Reconstrucción de Santander, merece especial mención el antiguo surtidor de gasolina, cuya marquesina, que ha sufrido una leve reconversión respetando su legado, se ha reconvertido en la nueva cafetería de los Jardines.
El estudio de Renzo Piano ha proyectado, en el marco del proyecto de reforma de los Jardines, una nueva Oficina de Turismo de 100 metros cuadrados, abierta al público desde el pasado mes de abril.
Juegos infantiles en colaboración con E.ON
Así mismo, en el marco de la remodelación de los Jardines de Pereda, se encuentra también la ampliación y renovación de la zona de juegos infantiles, que ha pasado de 320 metros cuadrados a casi 800 de superficie. Un espacio único e innovador inspirado en el mar y en la importancia de las energías renovables, que ha sido diseñado con el fin de estimular la imaginación y la creatividad de los más pequeños, en línea con uno de los objetivos estratégicos del Centro Botín.
El área cuenta con nueve zonas de juegos entre las cuales se encuentra “la ola”, una instalación única en España, consistente en una red de 20 metros de longitud que permite a los niños realizar apasionantes recorridos.
El presupuesto de construcción de estos nuevos juegos infantiles, 400.000 euros, ha sido sufragado a partes iguales por la Fundación Botín y por la empresa eléctrica E.ON. que se ha convertido en el primer socio estratégico del Centro Botín.
Túnel del Centro Botín
Este nuevo acceso, abierto a la circulación el pasado 21 de junio, permitirá un tráfico anual de 6,7 millones de vehículos en sentido oeste-este (sentido de la calle Marqués de la Hermida a Puertochico) y de 6,3 millones en sentido este-oeste (sentido Puertochico a calle Castilla).
El paso inferior, realizado como parte del proyecto del nuevo Centro Botín, ha mejorado la fluidez del tráfico de entrada a la ciudad al quedar eliminada la regulación mediante semáforos, logrando que los accesos a los aparcamientos de la plaza Alfonso XIII y la Plaza de las Cachavas mejoren sus capacidades actuales.
Esta infraestructura, cuyas obras comenzaron el 8 de noviembre de 2012, tiene una longitud total de 372 metros, de los cuales 219 están soterrados y han sido habilitados para el peatón, uniendo el frente marítimo con el centro histórico, comercial y social de la ciudad.
La sección transversal consta de dos aceras laterales de 1,20 metros de ancho, dos carriles por sentido de 3,40 metros de ancho cada uno, y una zona intermedia de 1,50 metros, con dos arcenes de 0,50 metros y una barrera de contención central, hasta formar un ancho total mínimo de 17,50 metros.
El Centro Botín
El Centro Botín, obra del estudio Renzo Piano Building Workshop (RPBW), en colaboración con Luis Vidal y Arquitectos, es el proyecto más global, más local y más social de la Fundación Botín. Sus objetivos estratégicos son: ser un centro de arte de referencia internacional, parte del circuito europeo de centros de arte de primer nivel, contribuyendo al desarrollo económico y social de Santander y Cantabria; ser un nuevo lugar de encuentro para Santander, que dinamice con arte y cultura la vida de la ciudad; y convertirse en un lugar pionero en el mundo que potencie la creatividad de niños, jóvenes y adultos a través de las artes y las emociones que éstas generan.
Para ello, tan importante es el propio edificio como los espacios públicos que se crean alrededor, gracias a la remodelación de los Jardines de Pereda y al paso inferior.
El edificio está organizado en dos volúmenes, unidos por un conjunto de plazas y pasarelas de vidrio y cristal que se convertirán en el distribuidor principal del Centro. El volumen Oeste estará dedicado íntegramente al arte, con un espacio expositivo de 2.500 metros cuadrados, divididos en dos plantas de 1.500 metros cada una.
El volumen Este (de menor tamaño) albergará un auditorio y una serie de espacios polivalentes en los que se desarrollará un programa educativo pionero, desarrollado conjuntamente con la Universidad de Yale y, gracias al cual, el Centro Botín potenciará la creatividad de Santander y Cantabria, contribuyendo a la generación de riqueza económica y social.
La construcción del edificio está siendo llevada a cabo por la UTE formada por las constructoras OHL y ASCAN, mientras que Bovis está a cargo de la gerencia del proyecto.
Fundación Botín
La Fundación Botín es la primera fundación privada de España por capacidad de inversión y por el impacto social de sus programas. Tiene como objetivo impulsar el desarrollo económico, social y cultural de la sociedad. Actúa en los ámbitos del arte y la cultura, la educación, la ciencia y el desarrollo rural, apostando por el talento capaz de generar progreso y explorando nuevas formas de crear riqueza.
Actúa sobre todo en España y especialmente en Cantabria, pero también en Iberoamérica.
La Fundación Botín destinará 80 millones de euros (15 a la construcción del paso inferior y otros 15 a la remodelación de los Jardines), la mayor inversión privada en una infraestructura cultural en España.
El proyecto ha sido desarrollado por el paisajista Fernando Caruncho en colaboración con el estudio de Renzo Piano.
Se ha duplicado su extensión de 20.000 metros cuadrados a 48.000 y triplicado su superficie verde, pasando de 7.003 a 20.056 metros cuadrados.
Hasta el próximo 10 de octubre, los Jardines de Pereda y su anfiteatro exterior acogerán un amplio programa de 150 actividades para niños, jóvenes, adultos y familias que llenarán de vida los Jardines este verano, comenzando así a cumplir su objetivo más local: generar un nuevo lugar de encuentro en el centro de la ciudad que con arte y la cultura dinamice la vida de Santander.
Esta programación se ha realizado de forma coordinada con el Ayuntamiento de Santander y la Fundación Santander Creativa, de cuyo Patronato forma parte también la Fundación Botín, y que también realizarán actividades en los Jardines durante estos meses.
La intervención en los Jardines de Pereda, iniciada en agosto de 2013, conserva la memoria del lugar respetando sus hitos esenciales y permite al paseante disfrutar de vistas y rutas inéditas, conduciéndole directamente desde el centro histórico de Santander hasta la Bahía.
Esta prolongación del centro de la ciudad al mar ha sido posible gracias a la anulación del antiguo vial que discurría delante de los Jardines y a la supresión del tráfico que, desde hace un mes, se canaliza por medio de un nuevo túnel, de 219 metros de longitud, que permite el paso de más de trece millones de vehículos al año.
Ya podemos empezar a disfrutar de uno de los espacios públicos más especiales de nuestro país, al borde de una de las Bahías más bonitas del mundo, con el Centro Botín integrado en ellos.
El Centro Botín es el proyecto más global, más local y más social puesto en marcha por la Fundación Botín en sus 50 años de historia.
El Centro Botín es un modelo de colaboración fiel y eficaz entre las administraciones públicas, las instituciones privadas y la sociedad en su conjunto.
Emilio Botín
Los Jardines de Pereda
Los Jardines de Pereda están situados sobre los terrenos ganados al mar que fueron utilizados como muelle portuario en 1805. Se inauguraron oficialmente en 1905, coincidiendo con la celebración de la Exposición de Artes e Industrias.
En ellos se encuentran ejemplares de magnolias, acebos, palmeras, cedros, castaños de Indias, pinos, bojs, tejos, tilos y manzanos de flor.
El proyecto de remodelación de los Jardines de Pereda ha conservado y potenciado todo aquello que el jardín ha guardado y protegido a lo largo del tiempo, tanto en las especies vegetales -el número total de árboles del Jardín es de 262, de los cuales 141 son de nueva plantación- como los hitos y monumentos que guardan la memoria del jardín y que son, en palabras de Caruncho: “expresión de la historia, de los momentos de esplendor de esta tierra cántabra”.
Como manifiesta el paisajista: “un jardín público antiguo debe siempre preservar y poner en valor esos hitos de la memoria social e individual que conectan el pasado con el presente y el futuro. Esto es lo que pretende este proyecto: unir presente y pasado en las formas estéticas del siglo XXI, abriéndolo al futuro”.
El propósito de la actuación en los Jardines de Pereda es devolver al jardín un nuevo esplendor, dándole al parque un siglo más de vida y celebrando así su bicentenario.
Sobre la trama actual del antiguo Jardín de Pereda, Fernando Caruncho ha sobrepuesto una cuadrícula que prolonga la de la ciudad, creando nuevas perspectivas que la conectan con la Bahía y el edificio de Renzo Piano. Sobre esta, se superpone una elipse, reminiscencia del diseño primigenio de los Jardines, que da unidad al conjunto, además de dotarle de un ritmo interno propio “a través de masas vegetales que se abren y cierran en zonas de sombras y claros”.
El tratamiento de la luz y el color en el conjunto es esencial. Para el acabado de caminos y plazas se ha utilizado un pavimento mixto de hormigón azulado tratado con sulfato de cobre y hierro, en conexión con los azules de la Bahía, y losas de granito, algunas de ellas recuperadas de los jardines existentes. De esta forma, este pavimento azulado se transforma en un elemento “acuoso” de conexión entre la ciudad y la Bahía.
En cuanto al mobiliario urbano, se han colocado más de 60 bancos de madera y acero inoxidable a lo largo de los caminos y plazas. Así mismo, se han mantenido los 19 bancos de piedra y forja existentes, remanentes de los años cincuenta, que se conservan y reubican en los Jardines de Pereda, manteniendo la conexión histórica de éstos al jardín.
Además de la numerosa memoria histórica que ha conservado el proyecto como la Fuente de Concha Espina, el Monumento a Pereda o el Monumento a la Reconstrucción de Santander, merece especial mención el antiguo surtidor de gasolina, cuya marquesina, que ha sufrido una leve reconversión respetando su legado, se ha reconvertido en la nueva cafetería de los Jardines.
El estudio de Renzo Piano ha proyectado, en el marco del proyecto de reforma de los Jardines, una nueva Oficina de Turismo de 100 metros cuadrados, abierta al público desde el pasado mes de abril.
Juegos infantiles en colaboración con E.ON
Así mismo, en el marco de la remodelación de los Jardines de Pereda, se encuentra también la ampliación y renovación de la zona de juegos infantiles, que ha pasado de 320 metros cuadrados a casi 800 de superficie. Un espacio único e innovador inspirado en el mar y en la importancia de las energías renovables, que ha sido diseñado con el fin de estimular la imaginación y la creatividad de los más pequeños, en línea con uno de los objetivos estratégicos del Centro Botín.
El área cuenta con nueve zonas de juegos entre las cuales se encuentra “la ola”, una instalación única en España, consistente en una red de 20 metros de longitud que permite a los niños realizar apasionantes recorridos.
El presupuesto de construcción de estos nuevos juegos infantiles, 400.000 euros, ha sido sufragado a partes iguales por la Fundación Botín y por la empresa eléctrica E.ON. que se ha convertido en el primer socio estratégico del Centro Botín.
Túnel del Centro Botín
Este nuevo acceso, abierto a la circulación el pasado 21 de junio, permitirá un tráfico anual de 6,7 millones de vehículos en sentido oeste-este (sentido de la calle Marqués de la Hermida a Puertochico) y de 6,3 millones en sentido este-oeste (sentido Puertochico a calle Castilla).
El paso inferior, realizado como parte del proyecto del nuevo Centro Botín, ha mejorado la fluidez del tráfico de entrada a la ciudad al quedar eliminada la regulación mediante semáforos, logrando que los accesos a los aparcamientos de la plaza Alfonso XIII y la Plaza de las Cachavas mejoren sus capacidades actuales.
Esta infraestructura, cuyas obras comenzaron el 8 de noviembre de 2012, tiene una longitud total de 372 metros, de los cuales 219 están soterrados y han sido habilitados para el peatón, uniendo el frente marítimo con el centro histórico, comercial y social de la ciudad.
La sección transversal consta de dos aceras laterales de 1,20 metros de ancho, dos carriles por sentido de 3,40 metros de ancho cada uno, y una zona intermedia de 1,50 metros, con dos arcenes de 0,50 metros y una barrera de contención central, hasta formar un ancho total mínimo de 17,50 metros.
El Centro Botín
El Centro Botín, obra del estudio Renzo Piano Building Workshop (RPBW), en colaboración con Luis Vidal y Arquitectos, es el proyecto más global, más local y más social de la Fundación Botín. Sus objetivos estratégicos son: ser un centro de arte de referencia internacional, parte del circuito europeo de centros de arte de primer nivel, contribuyendo al desarrollo económico y social de Santander y Cantabria; ser un nuevo lugar de encuentro para Santander, que dinamice con arte y cultura la vida de la ciudad; y convertirse en un lugar pionero en el mundo que potencie la creatividad de niños, jóvenes y adultos a través de las artes y las emociones que éstas generan.
Para ello, tan importante es el propio edificio como los espacios públicos que se crean alrededor, gracias a la remodelación de los Jardines de Pereda y al paso inferior.
El edificio está organizado en dos volúmenes, unidos por un conjunto de plazas y pasarelas de vidrio y cristal que se convertirán en el distribuidor principal del Centro. El volumen Oeste estará dedicado íntegramente al arte, con un espacio expositivo de 2.500 metros cuadrados, divididos en dos plantas de 1.500 metros cada una.
El volumen Este (de menor tamaño) albergará un auditorio y una serie de espacios polivalentes en los que se desarrollará un programa educativo pionero, desarrollado conjuntamente con la Universidad de Yale y, gracias al cual, el Centro Botín potenciará la creatividad de Santander y Cantabria, contribuyendo a la generación de riqueza económica y social.
La construcción del edificio está siendo llevada a cabo por la UTE formada por las constructoras OHL y ASCAN, mientras que Bovis está a cargo de la gerencia del proyecto.
Fundación Botín
La Fundación Botín es la primera fundación privada de España por capacidad de inversión y por el impacto social de sus programas. Tiene como objetivo impulsar el desarrollo económico, social y cultural de la sociedad. Actúa en los ámbitos del arte y la cultura, la educación, la ciencia y el desarrollo rural, apostando por el talento capaz de generar progreso y explorando nuevas formas de crear riqueza.
Actúa sobre todo en España y especialmente en Cantabria, pero también en Iberoamérica.